Martes, Noviembre 26, 2024
“Recibí una Ley, Dejo una Universidad”
Abr 04 2019- Detalles
Esta fue la sabia respuesta que el Doctor Orlando Lora Barros, dio a los periodistas en su momento, cuando abandonaba la ciudad para reintegrarse a sus labores en la Universidad Nacional de Colombia, después de haber cumplido con una tarea gigante en Valledupar: la estructuración, organización, adecuación, desarrollo y dirección de nuestra naciente Universidad Popular del Cesar.
Hoy, agobiado por un inmenso pesar, tengo que registrar para toda la comunidad universitaria, la triste noticia relacionada con la muerte de quien fuera nuestro primer Rector. Su muerte ocurrió en la ciudad de Ibagué. Orlando Lora Barros, fue un hombre excepcional, cristiano, practicante y humanista. Inteligente, justo, riguroso y preciso en sus planteamientos. Su tarea en la rectoría fue prístina, fecunda, amplia y dinámica.
Como rector, se destacó por ser recto, honesto y exigente, y también un hombre serio, brillante, expresivo el cual convencía y agradaba. Doctor en Filosofía y Ciencias Sociales, recibió en el año de l976, de las manos del Gobernador del departamento del Cesar, Alfonso Araujo Cotes, la Ley 034 del 19 de noviembre que daba vida jurídica a nuestra Universidad.
La institución inició sus labores administrativa y académicas el primero de agosto de l977, con los programas de Administración de Empresas, Contaduría Pública, Enfermería Superior y Licenciatura en Matemáticas y Física. Igualmente, integró el primer Consejo Superior Universitario de la siguiente manera: Doctor Alfonso Araujo Cotes, Gobernador; Doctor Julio Villazón Baquero, Delegado del señor Presidente de la República; Doctor José Nicolás Daza, Delegado del señor Ministro de Educación Nacional; Doctor Jaime Murgas Arzuaga, Representante de los Gremios del Cesar, Luis Alfredo Vergel, Representante de los Profesores, los estudiantes Pedro Chaparro y Helio Martínez, y el Señor rector Orlando Lora Barros.
A partir del primero de agosto de 1977, el doctor Lora Barros asume el compromiso de desarrollar académicamente y como corresponde a las instituciones de educación superior, sus funciones de: docencia, investigación, extensión y bienestar universitario. A partir de entonces se inicia la historia de la Universidad a través de etapas: unas de realizaciones, de expectativas, de ilusiones y otras de tropiezos, dificultades e inconformidades a todo nivel, pero el doctor Lora, siguió su marcha con paso firme hacia la consolidación de una institución respetada y respetable, buscando la verdadera excelencia académica y administrativa que en principio nos fue esquiva por momentos, pero gracias a la colaboración de sus Fundadores, Profesores, Estudiantes, Trabajadores y Egresados, conservamos el optimismo y el rumbo que nos conduciría a posicionarnos con gran eficacia y eficiencia en el mundo académico.
Desde luego que la administración del Doctor Lora Barros, fue la resultante de una tarea honesta, ardua, seria, disciplinada y con verdadero sentido de pertenencia hacia ella, en donde todos aportamos y estuvimos comprometidos, porque todos somos la Universidad y todos somos responsables de su presente y de su futuro
Desde esta humilde columna, estoy expresando mi más dolido pésame a los familiares del Doctor Lora Barros, en el Cesar, la Guajira y en la ciudad de Ibagué, su lugar de residencia. Igualmente a toda la comunidad universitaria y a su rector, Enrique Meza Daza.
Por:
Luis Zabaleta Cabrales
Representante de los Ex Rectores.
Universidad Popular del Cesar.
